8M, EL FEMINISMO SE REBELA
El Feminismo no está dividido aunque así se pregone desde los medios. Eso sí, las feministas estamos enfurecidas y decepcionadas por cómo los partidos de izquierda han intentado ensuciar y desfigurar el movimiento feminista y por cómo han logrado convencer a muchas personas de que ellos lo representan.
En este artículo, Juana Gallego reconoce la responsabilidad del feminismo al ser confiado y estar abierto a integrar a otros colectivos también discriminados. Cuando en las grandes movilizaciones de 2017 y 2018 se sumaron sindicatos, asociaciones, partidos y otros grupos lo hicieron buscando su propio interés. Poco podían compartir los postulados feministas quienes no se habían preocupado jamás por los problemas de las mujeres.
Los grupos transactivistas, fuertemente apoyados por instituciones y medios, se han apropiado de espacios feministas lo que ha generado la imagen de que el feminismo es un conjunto de ideas delirantes. A la vez, las mujeres feministas que han alzado la voz mostrando su desacuerdo, han sido acosadas, silenciadas y canceladas.
Recuerda la autora cómo se ha jugado con la baza de los Derechos Humanos, pero afirma que ya ha quedado expuesto el delirio de creer en la existencia de mujeres con pene o de hormonar a menores. Esto jamás fue feminismo aunque así se pregonara desde el mismísimo Ministerio de Igualdad.
Por eso, el feminismo se ha rebelado y no acudirá a manifestaciones convocadas por quienes no saben definir qué es una mujer y sólo defienden privilegios masculinos. Por eso, las feministas recuperarán el 8M para reclamar los derechos de las mujeres.
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